Una escultura para Luis Landriscina en Cosquín

A cincuenta años de su debut en este escenario, el humorista chaqueño tuvo su homenaje merecido en Cosquín. Estuvo acompañado de algunos de los integrantes de aquella histórica delegación y de jóvenes artistas.

Uno de los platos fuertes de esta edición 2014 de Cosquín tuvo lugar cuando don Luis Landriscina, junto a la delegación histórica de Chaco de los años 1963 y 1964, volvió a Cosquín a revivir aquel momento que, sin dudas, cambiaría su vida para siempre. De ese menudito joven que llegó a Cosquín desde Villa Ángela, su ciudad adoptiva, al señor humor con mayúsculas en el que se transformó han pasado muchos años, cinco décadas ya de haber sido elegido en este mismo escenario como la revelación de aquella década dorada del folclore y, particularmente, de Cosquín.

El artista fue homenajeado con varios reconocimientos la noche de su participación, uno de ellos, fue donado por la Fundación Urunday, que resultó ser una escultura en pequeño formato de la artista chaqueña Mimo Eidman. Al momento de tomar entre sus manos dicha distinción, fue automático en Ladriscina contarle a los presentes en la plaza y a los televidentes: “el chaco es reconocida por las esculturas en sus calles” y además recordó la trayectoria de quien es presidente de la Fundación, Fabriciano.